El tiempo pasaba y con él menguaban las esperanzas de quienes afuera esperaban desesperados. No se sabía nada de aquellos que la tierra literalmente "había tragado".
Pero poco mas de 2 semanas después se lograba la comunicación con los mineros que habían logrado guarecerse en el refugio y que para la emoción de todo el pueblo chileno confirmaban que estaban todos con vida. Una sonda había logrado llegar hasta el refugio y desde tubos de PVC la comunicación con el interior comenzó.
Comenzaron entonces a enviarles alimento, consistente en bocados de atún, leche y bebidas con glucosa. Para ese entonces los mineros ya no tenían alimentos. Se dice que cada uno rebajó en promedio cerca de 8 kilos en los meses que estuvieron atrapados.
Mas tarde comenzaron a bajar los mensajes que los familiares emocionados escribían en papel.
Tres máquinas hicieron su trabajo (como Plan A, Plan B, Plan C). Fueron grandes protagonistas en el rescate, y se esperaba inicialmente que los mineros fuesen rescatados para la Navidad en diciembre. Pero pese a los primeros pronósticos, los tiempos se acortaron y pronto el mundo tuvo la noticia de que el rescate sería efectivo en Octubre.
Y por fin en la madrugada del miércoles 13 de octubre, Manuel González, el primer rescatista ingresaba a la cápsula Fenix 2, para descender casi 700metros hasta el refugio de la mina San José, en un viaje que inicialmente se decia duraría una hora o mas, pero que afortunadamente duró poco mas de 16 minutos.
Sin duda uno de los puntos de gran emoción, cuando los 33 hombres tuvieron contacto con otro humano que venía a socorrerlos desde la superficie luego de mas de 2 meses de aislamiento.
Y aunque la cápsula subiría vacía... al bajar el rescatista se encontró con que el minero que saldría en primer lugar ya estaba pronto para ascender.... y así fue.
Y bajo la alegría y la emoción inmensa de los familiares, y de cada chileno y cada espectador que de muchos países seguían la trasmisión, los mineros fueron "emergiendo" a la superficie como quien regresa nuevamente a la vida.
El segundo minero en salir, gritó: - Apuren esta caja! - cuando la cápsula aún estaba unos metros bajo tierra, provocando las risas de quienes esperaban su salida. En la foto se le ve dando un abrazo al presidente Sebastián Piñera luego de repartir souvenirs (piedras que trajo de la mina en un bolso)
Abrazos afectuosos de sus familiares.
Ya entrada la noche del miércoles 13 de octubre, el último de los 33 mineros recorrió en apenas 10 minutos los 622 metros que lo sacaron finalmente de la oscuridad para que luego de 70 días pudiera por fin respirar aire puro. El escogido para el final fue el chileno Luis Urzúa, el capataz de turno, un topógrafo de gran temple y don de mando que ayudó en mantener unido el grupo durante mas de dos meses.
Mientras arriba todos aplauden, gritan de alegría y festejan a mas no poder, abajo, muy abajo, los valientes rescatistas muestran un cartel que quedará en la retina de nuestros ojos: "Misión Cumplida CHILE"
Poco después comienza el ascenso de los 6 rescatistas. Ya es la madrugada del jueves 14 cuando el último rescatista se despide del refugio, sube a la cápsula y solo, cierra la puerta de la misma. Entonces comienza el ascenso del último hombre. Este hombre fue el mismo que se animó a bajar cuando aún no sabíamos a ciencia cierta si lo lograría.... Y lo logró!
Todos los mineros fueron derivados al hospital regional para someterse a revisiones que verificarán su estado de salud. La mayoría están nomas bien de salud, solo quedarán momentaneamente internados 3, uno con neumonía y dos con infecciones dentales.
Ha sido un trabajo de equipo y porqué no.. también un milagro. Podría decirse que ha sido una tragedia con final feliz. Y sin duda quedará en la memoria -durante muchos años- de quienes vivimos este rescate fantástico minuto a minuto.
Felicidades hermanos Chilenos!!
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